Ars longa, vita brevis

lunes, 24 de octubre de 2011

Las cuatro caras del humor


Dime de que te ríes y te diré quien eres.
Los investigadores se han aventurado a estudiar la naturaleza del humor y han llegado a la conclusión que nuestra disposición o disposiciones por determinado tipo o tipos de humor revelan nuestra conducta general.
La clasificación se establece en cuatro categorías de humor: absurdo, satírico, agresivo y sexual.
El humor absurdo tiene como base la incongruencia, exento de componentes agresivos o sexuales las personas introvertidas son más receptivas a el así como al humor satírico e incluso pueden sentirse agredidas cuando se ridiculiza a personas o instituciones.
La tendencia de los extrovertidos puede manifestarse por el contrario más proclive al humor agresivo o sexual y suelen gustar más de los chistes que las personas introvertidas.

1ª viñeta de la derecha arriba, humor agresivo: “ Piensa lo que quieras, pero deberías admirar las decisiones instantáneas de tu jefe”.
2ª viñeta de la izquierda arriba, humor satírico: “ Y algo más... quiero la mitad de la sabiduría.”
3ªviñeta de la derecha abajo, humor sexual: “Ven aquí, Tarzán”.
4ª viñeta de la izquierda abajo, humor absurdo. “Tengo un sueño...”.
El sentido del humor desvela la frivolidad de lo serio y la seriedad de lo frívolo en un término medio.
El frívolo se desvela como insípido y molesto riéndose de todo sin preocuparse de si molesta o hiere a otras personas por el contrario el serio nunca tiene nada gracioso que decir y confirma que nadie ni nada deben ser objeto de burla y le resulta molesto que otros puedan burlarse de él.
El carácter se determina por la broma que ofende, dictaminó Lichtemberg.
La ausencia de humor es la carencia de la humildad sin embargo caeríamos en una falacia si creyéramos que sólo las buenas personas son poseedoras del sentido del humor, un mal sujeto puede tener un humor refinado y una buena persona estar exento de el.
El humor es una herramienta crítica colosal que diferencia lo que es reírse de y reírse con incluso en temas escabrosos como por ejemplo el holocausto.



Chaplin debido su película: El gran dictador, aducía que como condición el humor estaría en esa disponibilidad decantándose a favor del débil contra el fuerte.
La delgada línea del sentido del humor se cruza cuando intervine además la ironía ya que ésta puede mostrarse sarcástica, despiadada, humillante e hiriente incluso ejercida por un esteta que no repara en códigos éticos con tal de hacer reír y un ejemplo serían los epigramas de Óscar Wilde, una perversidad inteligente.
Pero si la ironía es utilizada con trazos de resistencia es un catalizador que libera.
La primera máxima del sentido del humor es reírse de uno mismo pues con ello se toma la suficiente distancia para autoaceptarnos tal como somos imperfectos y falibles, no importando que otros se rían de ti, porque ya antes los hemos hecho nosotros.
El gran antídoto contra el miedo es reírse del mismo le desproviste de amenazas o al menos las aligera.
Reir mejora nuestra salud y nuestro rendimiento aumenta nuestra imaginación, nuestra alegría, aprendizaje y esperanza.
La risa es el ruido y la sonrisa es el gesto facial y ambas son espontáneas, alegres, divertidas al punto que contagiosas y ambas por el contrario se manifiestan a su vez con cinismo o tristeza, desengaño o escepticismo.
Antes de hablar un bebé ríe y sonríe, bien de motu propio bien porque es estimulado por su madre mediante las cosquillas.
Siendo ya adultos nuestra tendencia a la risa disminuye y no solemos reír en soledad.
Las dos son universales y no necesitan traducción incluso cuando manifiesta como sardónica, la risa es trasgresora, cercana, familiar.
La probabilidad de hacer reír con éxito es menor que la de hacer llorar pese a que a la risa se le adjudique un carácter veleidoso e insustancial sin embargo si realizásemos una estadística mundial la tristeza ganaría por goleada a la alegría.


Ya  probablemente se encuentren y tengamos más motivos para llorar que para reír no únicamente por los que nos sucede personalmente sino por lo que sucede alrededor y aún lejos de nuestro entorno. Preocupante ¿no?
La reconsideración que se hace del arte es más valiosa, más intensa , si se componen de drama que de comedia.
El bufón aún hoy no saldado su estigma de inconsistencia.
Se puede llorar de risa, se comienza reír y se acaba llorando de tristeza liberando la una a la otra y al contrario por tanto son un contraste que se complementa.
Las drogas exageran ambas.
La filosofía y otras ramas de la ciencia ha estudiado la risa continua estudiándola ya que son una manifestación atávica inherente al hombre, a los primates e incluso a otras especies como los perros.
La risa es evolutiva.

El humor contiene una demostración de grandeza, la distancia que más acorta a dos personas es la risa.
Reír afirma la vida; reír es soñar así que reafirmémonos y aún sin motivos aparentes seamos risueños.

 “Porque la risa es sol que ahuyenta el invierno del rostro humano” decía Víctor Hugo y con su permiso añado también del corazón :-)